Hace unos días hablaba de un artículo de Edgar Morin del año 72. Hoy Morin tiene 89 años y acaba de publicar un nuevo libro "la Voie" ("la Vía"), con la misma lucidez, pertinencia e intensidad, que siempre ha caracterizado al padre del "pensamiento complejo".
Quiero hablar hoy también de otro hombre maravilloso y antiguo resistente, como Morin, que ha causado un verdadero movimiento en Francia en los últimos meses, con la publicación de un pequeño ensayo "Indignez-vous" ("Indignaos", ya publicado también en español, según he leído)
A sus 93 años, Stéphane Hessel mantiene intacto su espíritu de lucha contra las injusticias y su compromiso social y político. Que maravilla.
Escribe cosas como (traducción propia):
"Los responsables políticos, económicos, intelectuales y el conjunto de la sociedad no deben desistir, ni dejarse impresionar por la actual dictadura internacional des los mercados financieros que amenazan la paz y la democracia.
Yo os deseo a todos, a cada uno de vosotros, tener un motivo de indignación. Es muy importante. Cuando algo nos indigna, como a mi me indignó el nacismo, entonces nos convertimos en militantes, fuertes y comprometidos. Nos reunimos con la corriente de la historia y la gran corriente de la historia debe continuarse gracias a cada uno de nosotros. Y esta corriente va hacia una mayor justicia y una mayor libertad, pero no esta libertad incontrolada del zorro en el gallinero. (..)"
Que modelo de vida y de compromiso ofrecen estos dos hombres. Que honor poder leer sus pensamientos, contagiarse de su maravillosa energía y compartir su experiencia y su visión. Si ellos son capaces de tanto a su edad, cuando lo normal es que ya no tuvieran ni energías, ni esperanzas y sus neuronas se hubieran ido desintegrando con el paso de los años... de cuanto deberíamos ser capaces nosotros, las nuevas generaciones...
Nuestra es la responsabilidad de escucharles y dejarnos contagiar... salir de nuestra pasividad, desencantamiento y resignación caracterial y buscar razones evidentes para estar indignados, como dice Hessel, estudiar, buscar y construir vías y alternativas, como Morin.
Empecemos a ser conscientes de que sí está en nuestras manos que la realidad cambie...
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